Cómo la fisioterapia ayuda a tu sexualidad

Si te hablamos de fisiosexología, ¿qué te dice este concepto?¿Lo conocías?. Seguramente, la mayoría de respuestas serán negativas, por eso, te exponemos este tema en el día de hoy.

Lo primero que se debe tener en cuenta es que, aunque existan más incidencias en disfunciones del suelo pélvico en mujeres, también los hombres la sufren. Como las causas de estas incidencias pueden ser diferentes, el tratamiento debe ser multidisciplinar: ginecólogos, psicólogos-sexólogos y fisioterapeutas tienen que trabajar juntos. En este caso, el fisioterapeuta es el que se va a encargar de los problemas relacionados con la fisiología.

Qué es la fisiosexología

Es la rama de la fisioterapia que aborda la rehabilitación del suelo pélvico y la disfunción sexual. Se conoce también como fisioterapia de suelo pélvico y engloba un conjunto muy amplio de disfunciones, que se pueden tratar a partir de ejercicios musculares y terapia manual. Entre ellas, las más habituales serían la dispareunia, el vaginismo, la anorgasmia, la eyaculación precoz y la disfunción eréctil.

Existen cuatro ámbitos en la rehabilitación del suelo pélvico:

• Urología. Tratando incontinencia urinaria, patología prostática o prolapsos, entre otros.
• Ginecología y obstetricia. Donde se suelen tratar trastornos de la menstruación, menopausia, preparación al parto o recuperación postparto
• Coloproctología. Ocupándose del estreñimiento, incontinencia de heces y temas relacionados.
• Fisiosexología. Es la gran desconocida y ayuda mucho a solucionar disfunciones de tipo sexual.

Qué ocurre en una consulta de fisiosexología
Según fisioterapeutas especializados, en cualquier caso es necesario una entrevista clínica y una valoración musculoesquelética exhaustiva para realizar el diagnóstico y el tratamiento. Todo ello incluye una valoración de la zona genital, de carácter ginecológico o urológico, y de todo el área abdominal, pélvica y lumbar.

Otra de las claves en las disfunciones sexuales es el suelo pélvico. Es fundamental para poder disfrutar en las relaciones sexuales reequilibrar la fuerza, el tono y la flexibilidad del mismo. Se conseguirá esto a partir de técnicas específicas de recuperación funcional.

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